viernes, 28 de mayo de 2010

19. Quiero aMarte

El día que haya viajes al planeta Marte baratitos me compraré una camiseta para turistas como la que venden en Nueva York que dicen ''I love New York'' pero que diga ''Quiero aMarte''. Y con esa camiseta puesta y una taza de chocolate caliente en las manos (la temperatura en Marte es de unos -46 grados celsius en promedio) escalaré la montaña más alta de todo el Sistema Solar, el Monte Olimpo (de unas 2 veces y media la altura del Everest).



 El Monte Olimpo de Marte es el volcán más grande de todo el Sistema Solar 
(mucho más que el monte Maxwell, en Venus, o el Everest, en la Tierra.

 Aunque con vuestro permiso la escalaré en coche, ya que tiene un diámetro de unos 600 km, lo quiere decir que tiene una superfície similar a Ecuador, el país.


Eso sí, me han dicho que me tengo que fijar mucho en la previsión meteorológica cuando vaya allí porque de vez en cuando hay tormentas de arena, como las del desierto del Sahara, pero a mayor escalar. Estas tormentas llegan a afectar a todo Marte de forma global, no sólo a una región concreta.



 En Marte hay tormentas de arena que afectan a todo el planeta


Tengo todo el viaje planeado. He estado viendo un video promocional de la agencia de viajes explicando los lugares más chulos que visitar y otro que no puedo dejar escapar es Valles Marineris, el cañón más grande del Sistema Solar.






Superfície de Marte en 3D basada en los datos obtenidos con HRSC en Mars Express, 
la cámara de Mars Observer y el altímetro láser de la Mars Orbiter, todas ellas de la Agencia Espacial Europea (ESA).



Si lo comparamos con el Gran Cañón del Colorado, el más grande de la Tierra, se puede uno hacer una idea de cómo debe ser de impresionante. Valles Marineris tiene 4500 km de largo, 200 km de anchura y 11 km de altura (en cambio el Gran Cañón tiene sólo 350 km, 29 km y 1.6 km de largo, ancho y alto, respectivamente).


Valles Marineris es un gran cañón que ocupa gran parte del ecuador marciano.


Otra cosa que puede estar bien de visitar en Marte son los casquetes polares que también tienen hielo, pero de dióxido de carbono básicamente. El dióxido de carbono es el gas mayoritario en la ténue atmósfera de Marte (la presión atmosférica es sólo una centésima parte la de la Tierra).

En Marte también hay agua, pero sólo debajo de la superfície y en forma de hielo, ya que la baja presión atmosférica no permite que haya agua líquida. Aunque se cree que en el pasado sí que pudo haber líquido en la superfície formando mares y ríos.

Pero estoy pensando en qué haré por las noches allí en Marte. No creo que haya mucha vida nocturna (ni siquiera diurna). Con suerte me encontraré algunos microbios enterrados en Marte, pero marcianos de color verde o con ojos con forma de gafas de sol seguro que no. Todas las sondas que hemos enviado a Marte no han encontrado vida de forma clara.

Percivall Lowel afirmó ya en 1894 que él había visto con su telescopio un sistemas de canales artificiales en la superfície de Marte que servían para transportar agua de una punta a la otra del planeta, aunque al final sólo fué una ilusión óptica.

Y no es la única jugada que nos ha hecho nuestra imaginación. Aquel que quiera ver marcianos los puede ver en todos lados. Por ejemplo está la famosa ''cara de Marte'', que es simplemente una montaña de Marte que según como se ilumina por el Sol parece ser una cara mirando a la cámara de fotos. También hay, por ejemplo, un cráter en Marte con forma de emoticón o una roca con forma de humanoide.
















Hay estructuras en Marte que pueden llevar a pensar erróneamente que en el planeta hay marcianos saludándonos.

Pero no. Todos estos ejemplos sólo indican que hay vida en uno de los extremos del telescopio, en el nuestro. Y además vida con una gran imaginación.

Así que si en Marte no hay vida quizás me espero a que transformen Marte para que se parezca a la Tierra y así poder ir a las playas marcianas.









Aunque al ritmo en que estamos aumentando el dióxido de Carbono en nuestra atmósfera espero que eso pase antes de que sea nuestro planeta el que se transforme en uno tan muerto como Marte.








viernes, 21 de mayo de 2010

18. A dos velas

A mi mujer no le ha sentado muy bien que vaya por ahí diciendo que existen mujeres mejores que ella. Así que para compensarla he decidido hacerle una cena en la terraza a la luz de la Luna (más algunas velitas porque estamos casi en luna nueva y no creo que veamos demasiado las espinas del pescado a la salsa verde que le he preparado).

- ¡Oh! ¡Qué romántico! - me dice ella.
- Y mira qué cielo. - le contesto yo.
- Hacía tiempo que no me organizabas una cena así. Ahora que está mejorando el tiempo lo podríamos hacer más a menudo.
- ¿Has visto la Luna qué bonita está?
- Sí. Aunque a mí me gusta más cuando está entera, y no con forma de plátano.
- Pues así es como se ven mejor los cráteres. Con Luna llena deslumbra demasiado y además los cráteres se iluminan desde arriba, con lo que no dan sombras que permitan distinguirlos. Espera... te lo voy a enseñar.















La Luna cambia de aspecto a lo largo del mes. A veces se ve completamente iluminada (Luna Llena) y otras completamente oscura (Luna nueva). Entre tanto la Luna puede ser creciente o decreciente.


- No hace falta...
- Sí, mujer. Voy a sacar el telescopio.
- Pero estamos cenando...
- Es un momento. Aquí está. Ya la he enfocado. ¿Quieres mirar?
- Sí. Está muy bien.
- Te veo poco convencida... ¿Has visto los cráteres? Se formaron hace millones de años, con la formación del sistema solar, y aún están allí. En la Tierra esos cráteres habrían sido borrados por la tectónica de placas y la atmósfera, pero la Luna está geológicamente inactiva y, además, no tiene atmósfera. Allí no hay terremotos, ni volcanes, ni lava corriendo por debajo... Bueno, cuando se formó la Luna aún había material fundido en su interior. Lo sabemos porque las zonas oscuras de la Luna son ese material que se liberó al impactar otros asteroides contra la Luna. ¡Y pensar que la gente les llamó mares porque creían que eran los océanos de la Luna! He, he...


La superficie lunar está saturada de cráteres al no haber ningún 
mecanismo que los borre de su superficie.



- Sí, qué curioso. . . Venga, ven a cenar. ¿Quieres vino?
- Pues mirando la Luna me ha entrado sed, gracias. Es que la Luna está tan seca... Ahora dicen que han encontrado un poco de agua congelada en los polos de la Luna, oculta en unos cráteres donde nunca da la luz y así no se evaporan. ¡Pero vaya! Que el resto de la Luna está llena de polvo y rocas.
- Aquí tienes el vino. Vamos a brindar.
- Ahora voy. Es que cada vez que miro la Luna me entretengo intentando encontrar la bandera que los americanos pusieron cuando se posaron por primera vez en 1969. Je, je. Ya sé que es imposible. Necesitaría un telescopio de 200 metros de diámetro pero es que no me resisto. Teniendo en cuenta que el telescopio más grande del mundo se instalará en Chile en 2018 y ”sólo” tendrá 42 metros de diámetro creo que tendré que viajar ’in situ’ a la Luna si quiero ver la banderita. Y la cosa está difícil: desde el año 1972 el hombre no ha vuelto a la Luna! Algunas personas creen que los viajes al espacio actuales son a la Luna, pero sólo se quedan dando vueltas a la Tierra en la estación espacial internacional. Y por contra, otros creen que nunca se llegó a la Luna, pero sí que se llegó y no sólo una vez, sino seis.


El 20 de Julio de 1969 los estadounidenses pisaron la Luna y 
colocaron una bandera en su superficie.



- Bueno, ¿vienes ya o qué?
- Ya voy, ya voy. Y deja de poner esa cara, que siempre estas de morros. Ves, en eso te pareces a la Luna, que siempre nos muestra la misma cara porque tarda en dar una vuelta a la Tierra el mismo tiempo que tarda en dar un giro sobre ella misma. Hay una cara de la Luna que nunca veremos desde la Tierra. Es la cara oculta de la Luna. Que no es lo mismo que la cara oscura de la Luna. Pink Floyd tiene un disco llamado ”The dark side of the moon” pero para mío sería más misterioso si se llamara ”The hidden side of the moon" o algo así porque la cara oculta es la parte que nunca vemos. En cambio, la cara oscura sí que la vemos una vez al mes. Es precisamente cuando estamos en Luna nueva. Esos días la cara oculta es la que está iluminada. Así que no tiene nada que ver. Por cierto, ¿Quieres que ponga música de fondo? El de Pink Floyd también lo tengo. Estaría muy bien escucharlo mientras cenamos, ¿no? ¿Eugenia? ¿EUGENIA? ¿DONDE ESTÁS? ¿Te has ido ya a dormir?
¡Pero si no hemos cenado aún!




Desde luego, qué raras son las mujeres. No hay quien las entienda. ¡Y yo que estaba convencido que una cena romántica a la luz de la Luna era infalible para conquistar a una mujer!